Crónica Arde Complutum 2017
El Espíritu Santo os enseñará lo que tenéis que decir (Lucas 12,
12)
La semana de evangelización Arde
Complutum 2017 ha tenido lugar este año entre el convento de las dominicas de
Loeches, donde hemos
convivido durante los días de formación y oración, y las parroquias Sta. Teresa
y Virgen de Belén, de Alcalá, entre los días 17 y 23 de julio.
Nos
hemos congregado más de cincuenta misioneros, venidos de distintos puntos de
España y de distintas nacionalidades, para salir a la calle a anunciar el amor
de Dios.
Miguel
Ángel Pardo y Susana Esteban, de la Comunidad de la Presencia, que llevan el
Secretariado de Espiritualidad de la diócesis de Alcalá, han dado las
meditaciones de la mañana, sobre el Espíritu Santo y la Virgen María, morada
del Espíritu Santo.
Las formaciones de la tarde han
tratado sobre aspectos prácticos de evangelización y testimonios de vida
cristiana. El sacerdote Joaquín Garrigós, de la diócesis de Toledo, que forma
parte del grupo diocesano de evangelización Family Night, ha compartido con
nosotros su experiencia y el protagonismo del Espíritu Santo en la misión.
Amparo Medina nos dio un duro testimonio de lo que vivió antes de encontrarse
con el Señor y habló en defensa de la vida. La hermana Myriam, sierva del Hogar
de la Madre, dio a conocer el mensaje de Fátima de la mano de los pastorcitos,
Jacinta, Francisco y Lucía, y destacó el
valor redentor que tiene ofrecer los propios sacrificios. El grupo
Kerygma ofreció formación y testimonios sobre su experiencia de evangelización en la calle.
El miércoles por la tarde-noche
evangelizamos desde la iglesia del convento de carmelitas de Loeches, que nos
acogieron generosamente. Tuvimos un recuerdo agradecido a las hermanas
Agustinas Descalzas de Nuestra Señora de la Consolación de Alcalá, que nos han
recibido en su casa durante todo el curso para hacer las vigilias de
evangelización, y también para las hermanas Concepcionistas Franciscanas, que
nos han abierto las puertas de su convento de las Úrsulas. Gracias a todas
ellas por su maternidad espiritual, por su oración y ofrecimiento.
El jueves presidió la misa de
envío D. Juan Antonio Reig Plá, obispo de la diócesis, y en su homilía animó a
los laicos a salir a anunciar el amor de Cristo. Por la tarde llegamos a las
parroquias Sta. Teresa y Virgen de Belén, de Alcalá, que nos recibieron con
alegría y nos acogieron en sus casas.
Han sido dos días de vivir en
comunidad, comiendo juntos, evangelizando juntos, rezando juntos, dando
testimonio de nuestro amor a Jesucristo e invitando a todos los que veíamos a
encontrarse con Él.
El sábado por la noche nos
juntamos de nuevo todos los misioneros para hacer una gran vigilia en la
Catedral Magistral de Alcalá. Todo estaba preparado para que el Señor actuara y
derramara su gracia: en la plaza de los Santos Niños se arregló el escenario
para recibir a Jesús en la custodia y se instaló el equipo de música para la
adoración. Nos han acompañado muy buenos músicos: Enrique Mejías, Beatriz
Elamado, Vero Coronel… En el interior de la Catedral se dispusieron las mesas
de acogida, las sillas para los sacerdotes y los equipos de intercesión, el
presbiterio con los iconos y las cestas.
El sacerdote Álvaro Cárdenas, de
la diócesis de Getafe, dirigió la adoración y dio la bendición con el Señor a
todos los que estábamos en la plaza. Jesucristo hace milagros cuando quiere y a
quien quiere. Nos permite ver algunos, otros no, pero estamos seguros de que
esa noche tocó muchos corazones. Damos testimonio de ello.
Porque tú eres el Santo y habitas entre las alabanzas de Israel (Salmo 22, 4)
ALGUNOS TESTIMONIOS
-Francisco
Rodríguez, párroco de Sta. Teresa, una de las parroquias de misión: “Gracias,
en nombre de Jesús, por vuestro sí, por poder estar aquí; y no sabéis el bien
inmenso que es para un sacerdote ver esto. Yo me imagino el futuro de la
Iglesia exactamente así: parroquias vivas. A veces a los curas nos da la
sensación de que tenemos que tirar demasiado, pero esto son comunidades vivas,
enamoradas de Jesús; vida consagrada, matrimonios, sacerdotes, todos unidos y
mirando al mismo sitio. Esto es lo que la Iglesia necesita ahora. Pequeños
oasis, como dice nuestro Obispo. Ayudad a vuestros pastores, que os vean
enamorados de Jesús, con ganas de hacer cosas. Que salgamos juntos a
evangelizar el mundo”.
-Jorge de
Valladolid: “Es la primera vez que vengo
a Arde Complutum y me voy muy contento. Esta experiencia ha supuesto un antes y
un después en mi vida espiritual. Me voy sabiendo que tengo que evangelizar,
que es muy necesario ahora mismo y que todos estamos llamados a ello.”
-Jesús María, de Valencia (8 años): “Vine aquí porque quería llevar almas al Señor. Sentía que el Señor me llamaba a evangelizar. He estado evangelizando muy bien, presentando la Palabra y claro, como soy un niño, se fijaban más en mí y tengo más posibilidades de que se paren…Hay que llevar almas al Cielo.”
-Elena de
Madrid: “He
visto al Señor andar en Loeches, en Alcalá de Henares, en los pasillos, en la
capilla…le he visto vivo y resucitado. He vivido la tentación en mí y también
he vivido la grandeza del Señor. Me voy con la certeza en el corazón de que
Dios es real, que nos ama, y me voy con un deseo muy grande de que esto no se
apague. Ahora mismo estamos en el Cenáculo, con la Virgen María tan presente, y
ya es hora de ir a Galilea. Nos toca salir a nuestra vida, que es la misma que
dejamos, con los mismos problemas, la misma familia, el mismo trabajo, los
mismos vecinos, el mismo jefe, pero nosotros ya no somos los mismos porque
hemos visto al Señor y Jesucristo está resucitado.